(fuente:formajardin.blogspot.com)
Y llegamos a la sesión de evaluación y encontramos cientos, miles y millones de problemas. Poca técnica de estudio, poca constancia para hacer las tareas diarias, muchas risas, poca escucha activa y eficaz, indisciplina, inmadurez... podría seguir enumerando pero ese, no es el fin de esta entrada.
Con estas palabras quiero animar, incitar y provocar al profesorado a que pruebe cosas nuevas, a leer, a preguntar sin miedo, a investigar y salir con ello favorecidos. Con ello, quisiera que el profesorado dejara de buscar culpables, dejara de señalar con el dedo el fallo, dejara de repetir hasta la saciedad lo que todos sabemos y buscar una posible solución.
Dejemos las excusas, no es el camino hacia las soluciones. Partamos de nuestra realidad hacia nuestros sueños.
Dos frases simples pero que encierran mucho contenido. No nos escudamos en las carencias para no hacer nuestro trabajo, no utilicemos las dificultades como parapeto ante el trabajo, no nos sirve de nada salvo para perpetuar la situación. Pongámonos a la acción.
Y para actuar con certeza, seamos realistas, aprendamos a analizar y tomemos decisiones que no generen más frustración, más desigualdad, más desidia.
Tenemos un último trimestre en el que podemos poner en práctica las ideas y descubrir que obtenemos más de lo que esperábamos.