Poco a poco los días van pasado, las horas se van reduciendo y no nos queda nada para terminar este curso 2010-2011. Siempre nos pasa lo mismo, nos parece que nueve meses es demasiado tiempo, que el invierno se hace demasiado frío en según que destinos y que las ansiadas vacaciones de Semana Santa parecen inalcanzables, como oasis en un desierto. Pero poco a poco, vamos trabajando, vamos disfrutando, vamos agotándonos, alcanzando objetivos y llegamos a meta.
A falta de unos pocos días para terminar siempre recomiendo una autoevaluación, un autoanálisis de cómo lo hemos hecho. Nuestros pros, nuestros contras, los puntos a mejorar y aquellos a seguir mostrando por efectivos. ¿Por qué? porque si no lo hiciéramos no seríamos buenos docentes. No seríamos buenos profesionales y simplemente ejerceríamos un trabajo que no nos importa, que nos nos interesa y que no nos llena.
Los que siguen este blog con frecuencia (muchas gracias) verán que se avecinan muchos cambios y cada vez es más complejo eso de ser maestro/docente. El camino se va tornando más y más oscuro, más y más duro y no siempre vamos a tener fuerzas para continuar. Por ello, les recomiendo que piensen en sus sueños, en lo que quieren realmente, en lo que les hace ser feliz. Cuando lo tengan claro, al menos tendrán un GRAN motivo para seguir adelante, una BUENA razón para continuar a pesar de todo.
Pues quien dijo que ser profesor es la profesión más fácil del mundo, se equivocaba de cabo a rabo.
Ahora más que nunca deberían dar un paso atrás los que no quieren ser docentes, los que se levantan cada mañana pensando que es día más y un día menos, aquellos que no se involucran, que no ven la necesidad, que no entienden eso de la Educación Inclusiva, que no conocen la normativa, que no quieren conocerla, que no se reciclan, que no escuchan lo que los otros quieren decir, que no aprenden de los demás por cualquier excusa (van desde lo físico hasta lo moral), los que no quieren limpiar nada, los que solo les interesa su cuenta bancaria o que solo desean oír la sirena de salida para escapar. Por favor,háganse un gran favor y sean felices haciendo otra cosa. Por favor, dejen paso a los que desean un gran cambio.
A los otros, a los que la ilusión, la entrega, la pasión, la esperanza, la ganas de aprender y dar a conocer les sale por los poros. Saber estar. Empatía y cantidades industriales de paciencia. No queda otra, por lo menos por ahora.
Por delante nos quedan dos meses de incertidumbre. Dos meses en que no solo descansaremos sino que daremos vueltas y más vueltas al mismo tema: ¿Dónde estaré el próximo curso? ¿Cómo será el nuevo destino? Algunos lo saben, otros no... pero hay que pensar lo siguiente: siempre se aprende algo nuevo, aunque sea a no hacerlo como ellos.
(fuentedeportada: jordiquimerablogspot.com)
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