Ya en este último trimestre me planteo enseñar al alumnado de secundaria alguna que otra estrategia para aumentar el autocontrol y principalmente, aprender a solucionar los problemas que se plantean en su "duro" día a día de la adolescencia.
Seguimos recordando las buenas maneras o, como les digo yo, como hay que ser personas cívicas (respetando al prójimo, saludar bien, hacer peticiones de forma correcta, utilizar las palabras mágicas- gracias, por favor, perdona...-), y damos un paso más hacia la resolución de problemas por medio de la respuesta a cuatro preguntas básicas.
1º ¿qué tengo que hacer?: entendiéndose por qué quiero, qué necesito
2º ¿De cuántas maneras puedo hacerlo: para lograr mi objetivo
3º ¿Cuál es la mejor?: de todo lo que se me pasa por la cabeza (incluso las respuestas violentas y poco adecuadas) con cual consigo mi objetivo, sin olvidarme de ser una persona cívica.
4º ¿Qué resultado tengo?: autocrítica y autoevaluación de la actuación.
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Como ya sabrán, siempre doy importancia a la información visual ya que es más fácil de recordar que cualquier gran explicación. Para ello me he apoyado en el material que se encuentra en el libro:
"Relacionarnos bien" Programa de competencia social para niños/as de 4 a 12 años. Segura, Manuel y Arcas, Margarita. Ed. Narcea.
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